Desde las 9 de la mañana muchas personas ya se preparaban para adquirir las bolsas con pinos, una camiseta del acto, la azada (prestada) y el tíket que luego se cambiaría por un plato de paella al finalizar la "plantá" de este millar de coníferas.

El presidente de la entidad fallera Marcos Olmos y el resto de cargos participaron activamente durante toda la mañana de la plantada, al igual que la Fallera Mayor de Benicarló, Ester Escuder, que junto a algunas de las componentes de su corte de honor también se acercaron a colaborar.


Una vez plantados todos los pinos se desplazaron todos los que habían asistido a la ermita de San Gregorio donde se cocinaron y degustaron 3 paellas para todos los presentes y participantes.
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